Según la definición del concepto adicción por Sussman y Sussman (2011) Toda adicción presenta los siguientes síntomas:
- Capacidad para «engancharse» en conductas de las que se derivan consecuencias reforzantes.
- Excesiva preocupación por el consumo o conductas de las que se desprende un refuerzo positivo.
- Tolerancia o nivel de saciedad temporal
- Pérdida de control, en donde la frecuencia de la conducta se incrementa haciéndose cada vez mas automática.
- Dificultad en detener o evitar dicha conducta, a pesar de la existencia de importantes consecuencias negativas.
Cuando hablamos de una adicción no solo su causa es el consumo de sustancias, también a un patrón de conductas asociados a una recompensa o reforzadores inmediatos positivos.
Podríamos decir que cualquier actividad normal percibida como placentera podría ser susceptible de convertirse en una conducta adictiva.
Podríamos diferenciar entre adicciones químicas o con sustancias (alcohol, tabaco, cocaína, cannabis, benzodiacepinas, etc) y sin sustancias (internet, teléfono móvil, compras, juego, etc.)
Con todo ello es importante entender que no existe un único tratamiento que sirva por igual para todas las personas. Hay que procurar abarcar todas las necesidades del paciente, utilizando un enfoque multidisciplinar donde la medicación y terapia psicológica son en la mayor parte de los casos fundamental.
Si notas alguno de estos síntomas o te sientes identificado/a con este artículo puedes contactar conmigo aquí.
